Este es un regalo sencillo para tu primer año de vida.
Sencillo, pero lleno de magia.
En cada una de esas crayolas habita un mundo de color.
Dinosaurios, casas, carros, flores, niñas, niños, caballos, un sin fin de formas.
Cada crayola es un conjuro, que permite traer de vuelta todo lo que habita en nuestra memoria.
Nuestros antepasados más remotos lo sabían, y por eso llenaron sus casas de dibujos y formas.
Recuerda siempre que nuestra historia, la de todos los seres humanos, es una larga cadena de aventureros y exploradores.
Y esto lo sabemos porque se tomaron el tiempo de dejarnos testimonios de sus aventuras.
Estas crayolas son para que nos dejes testimonios de todos tus descubrimientos.
Papá y Mamá, que te aman.